Como en toda ocasión especial, las joyas también ocupan un lugar destacado en las bodas. De hecho, en estas celebraciones las joyas tienen un papel que va más allá de lo estético. Ya que como ocurre con el anillo de compromiso, las alianzas o las joyas de la familia, estos pequeños (o grandes) complementos están cargados de una gran simbología. 

La elección del anillo de compromiso

Para que una boda se celebre, antes lo normal es que un miembro de la pareja sufra los grandes nervios que se sienten al ir a comprar un anillo de compromiso. Y es que este anillo significa dos cosas: Una que has decidido dar el gran paso y querer pasar toda tu vida con alguien, y otra que te enfrentas a elegir un anillo entre millones y sin tener mucha idea de las características de cada uno de ellos.

Por suerte, hoy en día hay anillos de compromiso para todos los gustos y bolsillos. Y seguro que con la ayuda de algún familiar o amigo y con el asesoramiento de los dependientes, sabrás elegir el anillo perfecto. Además, si la novia es muy original, aconsejamos mirar todas las opciones que existen. Ya que actualmente los anillos de compromiso van más allá de diamantes solitarios. Aunque sin duda esta es siempre la opción más segura.

Dos alianzas, un mismo destino

Las alianzas de boda son la joya por excelencia que cargará con la simbología de la unión de la pareja. Esto, sumado a que se llevarán puestas a diario, supone una importante elección. Antiguamente ambas alianzas debían ser iguales. Sin embargo, hoy los dos miembros de la pareja pueden elegir el tipo de alianza que más se ajuste a sus gustos y necesidades, pudiendo ser ambas completamente diferentes. Y lo mismo ocurre con el grabado interior.

De oro amarillo, blanco o negro, bicolor, o incluso de plata; lo más importante es que se elija una joya cómoda, que represente nuestros gustos y el amor que sentimos hacia nuestro futuro marido o mujer.

Los gemelos y el reloj del novio

Los gemelos son el accesorio que permiten a los novios jugar un poco con su look y arriesgar todo lo que quieran. Por eso, las marcas apuestan por modelos muy originales, que pueden representar los gustos, la profesión e incluso los hobbies de los novios.

Cuando el novio apuesta por un look elegante, lo que dicta el protocolo es que las mangas lleguen hasta la muñeca y el puño sobresalga al menos dos dedos cuando se dobla el brazo. La mayoría de estas camisas llevan cierres para abrochar unos gemelos, un complementos que se ha convertido en un gran indispensable en una boda.

Otra de las joyas que no pueden faltar en el look de un novio es un bonito reloj. Al igual que pasa con los gemelos, la elección de éste dependerá por completo del tipo de estilismo que elija el hombre para su gran día. Los hay dorados, negros, de acero, o con correa de piel, así como desde los más finos, a los más grandes y llamativos; clásicos, minimalistas o deportivos.

En muchas ocasiones, esta pieza se convierte en el regalo que hacen los suegros o la novia al novio. Sin duda, un complemento para toda la vida que pasará a tener un significado muy especial por haber dado la hora en un día tan importante.