Desde la infancia muchas personas sueñan con vivir una verdadera historia de amor con final feliz. Los más pequeños fantasean sobre cómo será el gran día en el que el amor se materialice en forma de matrimonio. Cuando llega el tan deseado momento las ideas más pintorescas y originales empiezan a brotar en la cabeza de los protagonistas, en parte, ideas impulsadas por la gran industria del cine que trasladan a los espectadores bodas de lo más espectaculares. ¿Quién no ha soñado alguna vez con el ostentoso vestido de Carrie Bradshaw en ‘Sexo en Nueva York’? Pero fuera de la gran pantalla, algunas bodas rozan la ficción. A continuación, os dejamos algunos de los enlaces más espectaculares que han llamado la atención de los principales medios de comunicación.

La expresión ‘tirar la casa por la ventana’ es precisamente lo que han hecho algunas parejas en la celebración de su boda. Enlaces como el de Kate Middleton y el Príncipe Williams, que no solo ha sido la boda más mediática de la historia, sino que también ha sido la más cara con un presupuesto de 23 millones de euros. La gran boda del año que se celebró en la increíble abadía de Westminster, contó con la friolera de 1.900 invitados. La novia, como recién salida de un cuento de hadas, lucía un impresionante vestido diseñado por Sarah Burton y con una espectacular tiara propiedad de la bisabuela del novio.

Otra boda más que sonada fue el mediático enlace entre Kim Kardashian y Kayne West. No contentos con un día de boda, esta pareja celebró tres días de fiestas en dos de los lugares más alucinantes de Europa, decorados especialmente para dicha ocasión. Miles de dólares en arreglos florales y actuaciones en directo de las caras más conocidas del panorama musical pusieron el broche final a tres días de lujo y extravagancia.

Sin embargo, hablar de bodas espectaculares no es simplemente hablar de caras conocidas. Muestra de ellos son el centenar de bodas anónimas que año tras año se celebran y que, indudablemente, dejan huella. Una pareja italiana decidió darse el sí quiero por el rito balinés, una increíble boda celebrada a la orilla del mar de Bali. Ataviados con los típicos trajes de Indonesia, miles de pétalos de flores rodean este enlace al aire libre, cuyos protagonistas no fueron precisamente los novios, sino el enorme elefante que sirvió como transporte de la novia hasta el altar.

De igual manera, un multimillonario ruso sobrepasó los límites de la excentricidad. Una sala repleta de hojas y árboles, como si de un bosque se tratase, fue el lugar donde está pareja se prometió amor eterno. El enlace contó con una esposa que lució tres vestidos de novia, una tarta de más de nueve pisos y dos metros y medio de altura, y nada más y nada menos que la banda ‘Maroon 5’ para entretener a los invitados.

Lo anterior solo han sido cuatro ejemplos de la gran cantidad de bodas que no se caracterizan precisamente por el amor que se respira durante la celebración, sino por llevar el espectáculo, la majestuosidad y el lujo a límites insospechados.